Planea los alimentos de toda la semana; compra con inteligencia

L.N. Bárbara Juárez Torres

Hacer las compras en el súper para la elaboración de tus menús semanales no es tarea fácil, existen factores que pueden ayudar o perjudicarte a la hora de hacer tu despensa, por esta razón se enlistan 10 consejos prácticos que debes tomar en cuenta:

1.       Evita ir de compras con hambre, si lo haces, probablemente buscarás de manera inconsciente alimentos ricos en azúcares simples y/o grasas saturadas, esto es porque el cuerpo requiere energía y necesita ingerir calorías lo antes posible para calmar el hambre. Por esta razón se recomienda comer un aperitivo antes de hacer tus compras, de esta manera podrás pensar dos veces en los productos agregados a tu carrito.

2.       Elabora una lista con todos los alimentos que necesitas para tus menús semanales, así podrás tener mayor control tanto con lo que comes como con el gasto total de tus alimentos.

3.       Realiza las compras sola o con tu pareja, evita ir con niños. Si tienes niños pequeños, es recomendable que se queden en casa bajo la supervisión de un adulto, de esta manera evitarás adquisiciones impulsivas y tendrás más tranquilidad para escoger entre tantas marcas el producto que cumpla con tus necesidades, y completar sin prisa tu lista.

4.       No caigas en la mercadotecnia de los supermercados, es importante que conozcas la distribución y sus tácticas de venta, los alimentos de canasta básica por lo general se ubican al fondo, asimismo recorrerás todo el lugar sin dejar pasar de largo productos que llamen tu atención y que probablemente no necesites, pero te inciten a comprarlos, recuerda caminar directo a tu objetivo.

5.       Piensa dos veces en comprar productos sólo porque están de oferta. Muchas veces no es un descuento que valga la pena, no te dejes engañar. Revisa el precio regular, después compáralo con el descuento ofrecido.

6.       Compra por volumen, aunque no tengas una familia numerosa, de esta manera podrás ahorrar más en alimentos no perecederos, en el caso de cárnicos, corta en porciones, colócalos en bolsitas de plásticos y guárdalos en el congelador, cuando los necesites sólo descongela una porción, con este método la carne mantendrá color y textura.

7.       Compra frutas de temporada. Son más baratas y sus características organolépticas se encontrarán en excelente estado;aquellas frutas que no son de temporada se cultivan en invernaderos, lo cual aumenta considerablemente su costo en los supermercados.

8.        Analiza la calidad del alimento, los procesados y embutidos suelen ser más caros, y su contenido nutricional es pobre.  Aquellos que prometen ser reducidos en grasa y azúcar pueden contener grasas trans, no olvides comparar la tabla nutricional con otro producto similar y leer las leyendas en el etiquetado, esto podrá ayudarte a decidir entre varias marcas.

9.        Trasporta tus alimentos con cuidado, una vez en la cajuela del coche cuida que no se mezclen alimentos frescos con congelados, para evitar contaminación cruzada, también, aleja los alimentos con olores y sabores fuertes.

Al momento de almacenarlos, revisa que la temperatura de tu refrigerador sea la correcta y  procura usar recipientes de plástico para evitar quemaduras por frío en tus alimentos. Muchos alimentos básicos pueden durar en buen estado por periodos largos siempre y cuando se almacenen correctamente.

Busca en el etiquetado el modo y temperatura de conservación, con esto evitarás desperdicios y ahorrarás dinero.

10.    Visita de vez en cuando diferentes supermercados para conocer la variedad de  precios y productos que ofrecen.

Recuerda que cuentas con asesoría nutricional Easyvale.
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